Autobombo II, des-autobombo y desbalance de la semana 10
No este domingo si no el anterior, la Humimadre, que si recibe ‘ese’ periódico, llamó muy alegre a las 10 de la mañana para contar que estábamos ahí en el puritico centro de las news culturales. Me guardó la página completa (porque no es lo mismo guardar el link en interné) y yours truly muy feliz y muy egolatra de que si en la Bienal de Arte Textil se exhiben más de 100 obras de gente de muchos países y ‘el’ periódico publica solo 10 fotos y sale un fragmentito del trabajo que mi parejo artístico y yo hicimos… pues queremos pensar que anda bien la cosa. Porque no conozco al que lo escribió, ni al fotógrafo. Y si mi parejo artístico los conoce, le contestaría a las lenguas viperinas que :P (lero lero)
¡Sí! ¿y?
¡Vaya lío!
¡Los amiguis de mis amiguis son mis amiguis!!
Sin embargo cuando se voltea la página a mi ego le aparece un lunar de potencial cancerígeno con pelos y verrugas… No se sabe de que tamaño, pero es como calidad Cuajinais (calidad es calidad). Por eso es que al lunes siguiente no llegué donde La Gordis a restregarle mi fama, bueno, no solo por el lunar Cuajinais, si no porque también ella es algo ignoranta en esas cosas… y mi función en la vida no es cultivarle el gusto o el discernimiento poético. Me rehúso a que sea mi problema si tiene ambos en las patas. Me pagan para cultivar a mis pupilos que han estado muy felices con lo que les he hecho ir a ver ahí. Así que si no han ido, y hasta ellos que apenas están aprendiendo lo básico lo disfrutan, se sorprenden (qué se yo se pueden andar imaginando que van a ir a ver antes de llegar), y lo entienden sin que yo aclare mucho, pues ojalá que mis multitudinarios lectores también le lleguen (no hay peor intento que aquel que no se hace).
Aparte de todo eso, todo mi lado derecho anda chueco, mi voz tiene ganas de retirarse otra vez de sus aposentos, la Interlocutora me devolvió en el tiempo (entonces aún no estoy curada ni de eso, ni de aquello, ni de lo otro) y seguimos esperando el desenlace de la semana 17.
En ese desbalance (quizás se le puede considerar como un ligero progreso del balance con el lado derecho) tenemos a favor: un encuentro de ojos negros en las escaleras de las news culturales, un par de visitas individuales so pretexto de aclarar dudas que podían esperar al día que es, un correo alevoso y personalizado con información de interés profesional y de actualidad mundial… y lo más gracioso, una respuesta con varios zafis gramaticales que promiscuamente revuelven que le agradezco, con un tienes razón, que me lo recordaste (ignoramos si esta es tú o vos) y un te cuento por venir (inserte aquí algunos corazoncitos imprescindibles con sabor a chocolate con chile picante).
Yo podría responder que pío pío. El cielo se está cayendo.
(Era la frase del pollo en el cuento que me contaba mi abuela, que llevo 8 años tratando de recordar y no lo logro).
Y quisiera que me contaran el cuento unos de esos ojos mientras decido si me siento como una gallina...
Respuesta única -marque con X-
A) Mamá gallina
o
B) LA gallina .